Distribuidora con estacionalidad marcada
Una empresa de Bizkaia con ventas concentradas en verano necesitaba financiación en marzo. Sus bancos rechazaban créditos porque no entendían su modelo. Les ayudamos a presentar proyecciones mensuales que mostraban exactamente cuándo y cómo recuperarían el capital. Aprobación en dos semanas.
Restaurante evaluando expansión
¿Abrir un segundo local o no? El propietario tenía las ganas pero no los números claros. Modelamos diferentes escenarios: alta demanda, demanda media, inicio lento. Con esa información decidió esperar seis meses más y fortalecer la caja. Después abrió con colchón suficiente para aguantar el arranque.
Consultora tecnológica con crecimiento rápido
El problema del éxito: entraban proyectos pero la tesorería no aguantaba los plazos de cobro. Creamos un sistema de previsión semanal que les avisaba de problemas con 45 días de antelación. Así pudieron negociar líneas de crédito antes de necesitarlas urgentemente.